El éxito es un cuaderno de poesía

El éxito sin alma es un espacio deshabitado, inerte. Es un conjunto vacío, desocupado.

Cuando alguien se pregunta qué tiene para no triunfar se está dando la respuesta a sí mismo: “Noli foras ire, in te ipsum redi, in interiore homine habitat veritas”.

Los artistas de la pose y la sequedad (casi siempre parecen estreñidos) están constantemente quejándose porque se consideran meritorios del «mucho más», y no se dan cuenta que obtienen justo lo que merecen/merecemos, pues la vida da lo necesario para ser feliz y es el hombre el que la complica con carencias irracionales, querencias, apetencias, deseos y anhelos, la mayor parte de ellos bastante absurdos pues se puede ser igual de feliz en un escenario para 5 que para 10.000 personas. Y por supuesto igual de profesional, la dignidad la da el trabajo en sí no la envergadura de los números que se mueven.

Porque la felicidad del artista está en el camino no en la meta, y por eso muchos de los creadores que triunfaron jóvenes terminaron mal, porque a veces, el que llega rápido amontona experiencias de golpe, y el que va despacio disfruta del paisaje que le rodea.

No es que me haya vuelto poeta, rapsoda para los finos, ni filósofo (pues ya era ambas cosas); es que el fruto de la lectura de algunos que se consideran merecedores de lo que no tienen da que pensar. Es verdad que la vida no es igual para todos, pero al menos dejen que diga que de partida y según en qué condiciones (por supuesto), es igual de injusta.

El que busca el éxito sin merecerlo es como el que busca la victoria sin ir a la batalla, y terminará, como mucho, siendo célebre. Y la celebridad es un alimento para los mediocres, porque los que son sabios permanecen anónimos y te permiten creer como persona,  se hacen mejores cuando hablan, comparten y transmiten sus experiencias y saben que el éxito es una cosa común que no pertenece únicamente al plano de lo individual.

Es más fácil trascender por asociación, por sinergia, por eso el éxito es una cuestión de alma; y si bien debe ser cierto que todo el mundo tiene una, lo es menos que en realidad es la misma para todos, y tiene nombre de sentimiento. De ahí la importancia de buscar lo que nos une, frente a lo que nos separa.

El éxito es poder dar las gracias cada día, cuando te despiertas, porque estás vivo.

El éxito no es hacer únicamente lo que te gusta, es tratar de hacer bien incluso aquellas cosas que odias.

El éxito es poder mirar a los que amas cuando están dormidos.

El éxito son papeles y lienzos vacíos, ya lo dijo Cioran «lo que sé arruina lo que deseo», en la ignorancia está el secreto. El que quiera llenarlo de individualismo, egocentrismo y onanismo que lo haga, pero que no cuente conmigo.

No te rindas.

Foto de javier gonzalez en Pexels (gracias de nuevo).