«Yo vengo de la tierra australiana, donde hay mucha cerveza y los hombres vomitan, ¿escuchas, puedes escuchar el trueno? Será mejor que corras, mejor ponte a cubierto«.
Ese extracto de la letra de la fantástica canción de Men at Work, ‘Down Under‘ resume muy bien cierto espíritu aventurero, a la vez que festivo, que envuelve la música de celebración, la que de manera un poco injusta llamamos BBC (bodas, bautizos y comuniones). Yo, sin embargo, sólo veo a trabajadores y en muchos casos, a músicos de muy alto nivel que, o son forzados a buscar un formato que les dé de comer y alternan proyectos personales, o bien han encontrado acomodo (nunca mejor dicho) en un modo de festejo que es un compendio de virtudes fruto de la necesidad. Me consta que muchos no pueden vivir sin el directo, lo cual les honra, hablamos de un modo de vida muy respetable, pues lo que haga una persona para sobrevivir, es de su única y exclusiva incumbencia.
Marx ya pensó en el trabajo como una facultad exclusiva del ‘hombre’, como una forma de entender al ser humano. Carlos Marx, Carlitos para los amigos, que en su vida trabajó más bien poco, señala que es una actividad en la que el ser humano expresa su humanidad.
Y hay que avisar aquí, todos los que actuamos por la noche somos marxistas, al menos en cierto sentido del término, pues entendemos que en las sociedades más comunes, las del capitalismo, el trabajo se vive como una experiencia de alienación, frente al concepto de Carlitos, el currante, que aboga por concebir la brega como actividad de auto-realización. ¿Y qué músico no se siente realizado en directo? A lo mejor Charly fue el primer indie, no sé.
Y con cariño sincero me manifiesto a favor de esta panda de rojos con los que me siento más que identificado. Deseo mostrar mi apoyo, ánimo y solidaridad. De nuevo me perdonen si falta constancia de alguna banda (que faltarán y muchas), pues mi mente, créanlo, está ocupada en tantos quehaceres que si tuviéramos tiempo, el suficiente, reescribiríamos la geografía humana y el propio Capital, para así decirle al mundo que los músicos no somos una mercancía ni tampoco formamos parte de una carrera de carros. Quede constancia.
Free Soul Band. El decano de la música en vivo, referente único para muchos por su apuesta por la música de calidad.
Queen Of Magic. Tributo a Queen. Para mi gusto, una de las mejores bandas tributo que tenemos, no sólo en Málaga, sino en todo el territorio hispano. Hay mucho trabajo ahí.
Sr Mirinda. Una apuesta segura no, segurísima. Verlos ahí es un placer enorme, aman el directo. Long Live Rock and Roll.
Los Ejecutivos. El toque Pablo Fugitivo mejora muchas veces las versiones. Muy pero que muy bien acompañado de excelentes músicos.
Money Makers. Muy versátiles, te dejaran ojiplático, son capaces de tocar 100 canciones en un concierto de 2 horas.
Bee Gees, Tributo. Músicos de larga trayectoria y experiencia. No es una banda tributo más.
Capitán Vinilo. Selección de lo mejor pop-rock español de los 80 y 90. Muy serios y profesionales. Gran sonido en directo.
Super 8. Los éxitos de los 80 tocados con mucha energía, como debe ser.
Los Fabrizzios. Un torbellino en directo. Saben lo que hacen.
El Trío del Saco. Imposible aburrirte con ellos, gran manufactura, tremenda experiencia en directo.
Cuatro Santos. La mejor selección de Rock and Roll, una apuesta segura por su tremendo buen gusto. Auténticos.
